El Tribunal de Sentencia Primero de Cochabamba emitió el mandamiento de condena para el alcalde Manfred Reyes Villa y la Fiscalía y la Policía coordinan acciones para el cumplimiento de esa orden judicial. Se conoció que esa resolución puede cumplirse en cualquier momento.
“Expídase el correspondiente mandamiento de condena para el cumplimiento de la pena impuesta a Manfred Armando Antonio Reyes Villa Bacigalupi y Gustavo Osvaldo Navia Mallo por la comisión del delito de Conducta antieconómica, previsto y sancionado en el artículo 224 del Código Penal, en el Centro de Rehabilitación «San Sebastián» de varones de esta ciudad de Cochabamba, debiendo ejecutarse por el Ministerio Publico los referidos mandamientos”, refiere la resolución del Tribunal Departamental de Justicia (TDJ) de Cochabamba y que fue firmada el 17 de septiembre.
De acuerdo con los documentos oficiales, ese mismo día la juez Vivian Enríquez Monasterio, presidenta del Tribunal de Sentencia Primero de esta ciudad emitió el “mandamiento de condena” solo contra el alcalde de Cochabamba, pues en la orden ya no figura el segundo acusado.
“En cumplimiento a la Sentencia No. 09/2013 leída el 17 de abril, pronunciada dentro el proceso penal signado con el No. de NUREJ 200920476 seguido por el Ministerio Público contra Manfred Armando Antonio Reyes Villa Bacigalupi y otro, por la comisión del delito de conducta antieconómica, previsto y sancionado por el artículo 224 del Código Penal. La pena impuesta es de cinco años de privación de libertad”, señala el mandamiento de la juez.
En 2009, cuando Manfred Reyes Villa fungía como prefecto de Cochabamba fue denunciado por el delito de conducta antieconómica por supuestas irregularidades en la adjudicación de una ruta alternativa en El Sillar, ese proceso concluyó en 2013 y desde entonces había recursos judiciales que se estaban definiendo.
En dos declaraciones que realizó el burgomaestre cochabambino dejó su futuro en manos de sus electores y no mencionó si seguiría en la lucha judicial, aunque sus detractores afirmaron que ya no quedan más recursos y que ahora solo queda cumplir la condena.
//El Deber